Mueca en La nueva mañana

El pueblo del interior provincial tiene sus particularidades. Tiene un ambiente y un ritmo que es distinto al de la ciudad, claramente. Se trata de una cadencia que se palpa en sus personajes y en sus calles (indistintamente de si son de tierra o no) llena de símbolos inequívocos que emparenta unos pueblos con otros: Los modos de hablar, las polvaredas, los canes callejeros, los animales de campo, entre otras marcas propias de estos lugares. Se podría decir que hay una “mueca” que los distingue, siguiendo el título del libro de Pablo Giordano. Una mueca que es similar a otras pero a la vez anida en la particularidad de quien la vive a diario o la ha vivido y emigró a otros lares y se puede palpar en versos como este: “Las estrellas recién llegan, lo saben: / silente trepará Paula a mi techo / y, sentada a mi lado sobre el tanque, / comentará lo extraño, lo inquietante / de sentirnos así, no sé… tan vivos”.

Pero no se trata solo de un relato poético de un paisaje, cada poema es una escena sacada de la memoria para armar una biografía personal que se inscribe en ese marco de pueblo. Momentos cristalizados en versos que exponen una experiencia de vida sin caer en añoranzas. Es el propio cuerpo atravesado por esas reminiscencias que le son propias, que son parte de su propia identidad expuesta ahí, en el texto, como una mueca.

Mueca de provincia

¿Qué hace un poeta en un mundo desencantado? Esa pregunta está implícita en todos los poemas de Mueca de provincia. No es una pregunta metafísica sino física. Mundo significa en este caso un pueblo del interior, tan expuesto al cielo y a las estrellas como cualquier otro lugar de la galaxia. La respuesta, intermitente, fragmentaria, que ofrece Pablo Giordano es exponer la intimidad de ese desencanto, escribir su biografía, asumirlo irónicamente como una identidad o como un destino que se acepta y se rechaza a la vez. La mueca es un signo ambiguo que se expande por todo el espectro emocional que va desde la resignación a la indignación. Pero el hecho de que elija el endecasílabo como medida dominante de sus versos indica un artificio: Giordano no se limita a expresar sus sentimientos o a contar sus recuerdos, compone con ellos una serie de escenas (algunas inolvidables, como “La sombra te mata”, “El color de la sangre” o “Paula”) en las que el tiempo y el espacio (ese espacio visto desde los techos) parecen formar un remolino, demorarse, girar sobre sí mismos sin detenerse nunca, porque necesitan decir algo más, no se sabe muy bien qué ni por qué, y se comportan como esas fotos que vistas muchos años después ya no muestran solo la imagen original sino también lo que no sabían del futuro y que ahora, inevitablemente, saben: “Y tendré un corazón gris para siempre/ sin explicación ni acostumbramiento”.

Carlos Alberto Schilling

Publicar un libro en Instagram

   Copiando la iniciativa de la de la Biblioteca de New York (la de publicar libros en las historias de Instagram) aprovechando el gran crecimiento de la plataforma insignia de Facebook, a la que absorberá al igual que a WhatsApp; subí yo también un libro. Para probar y ver qué sucede con mis seguidores, empecé con un libro breve de poesía. Se trata de La Felicidad es un Gordini,  que escribí hace unos 15 años y publiqué hace 11 en una editorial cartonera de Córdoba. Fue mi primer libro, alguno de cuyos poemas subí por acá y ahora pueden leer entero en @pablogiordano sólo dejando el dedo posado sobre la pantalla para mantener la página, algo que de seguro,  Instagram a futuro corregirá de mantenerse la tendencia literaria.

   Por el momento los invito a leer dando abrir a la primera historia de mi perfil.

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Lanzamiento

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Este es Pasadena, mi nuevo libro de poemas. Una colección breve de versos e historias poéticas con un lenguaje que homenajea al neutro de los doblajes de mi niñez conformando una paleta de colores que refiere a la América lavanda de ciertas viejas cintas y fotografías de los años 50 y 60. Intente expresar algunas cuestiones emocionales con dicho lenguaje, espero haberlo logrado. En mis redes pueden ver los puntos de venta, por el momento sólo en la ciudad de Córdoba (la Argentina). Empieza con este poema:

 

 

estas son las palabras que nos sobrevivieron
fuimos extraños arrojando las cenizas de un aduanero
al viento del domingo

los añejos panteones argentinos
son perros pila petrificados
que pronto habitaremos

cansa el pecho tártaro
cansa además
que a las pulsiones del cuerpo
las monte la palabra